Shakira y yo.

Shakira es la perra de la familia, de la casa... de mi hermano.

Ladra por lo que tiene que ladrar, ella no se anda con molestias de ladrarle a su sombra. Se persigue la cola cuando está aburrida, y le aterran los alacranes. Come de todo, no es modesta, le entra a las crayolas que están tiradas en el patio y al jabón con el que lava la ropa mi mamá. Es una perra "corriente", casi ciega. Cuando era más joven brincaba tan alto con tal de ver el interior de la casa, que mi papá tuvo que cubrir media puerta con una tabla de madera...

Shakira es de algodón y le gusta dormirse entre la yerba mala que brota en las orillas de los bloques de cemento.