Nos dejábamos amar por cualquier nube vieja
Nos llama el tiempo
tan presuroso,
Es hora de unir
el presente con el pasado
(Vamos a sacar cuentas)
Recuerdo aquéllas tardes
De sol tan frío, de cielos gruesos
De árboles de alambre con golondrinas necias
meciéndose sin ritmo.
Trepados en el techo,
imantados boca a boca
buscando el riesgo,
el riesgo de besarnos y de que nadie nos viera,
de ocultarnos entre nuestros pechos,
de llorarnos hombro a pierna
contorsionados tanto más se pudiera sin que doliera.
Recuerdo como el viento
en tu cabello negro hacía sus apariciones
prisioneras de tu piel,
sus intentos por despeinarte
y la obsesión por mantenerte
tibio.
Recuerdo.
De la boca a los pies
habemos tantos recuerdos,
tantos olvidos,
tanta distancia, y aún no encuentro
al caracol que manchó la vida de aquello
que en un tiempo fue lo que tuvo que ser.
Es hora de sacarnos cuentas
de jugar un rato,
de unir quizás pasados en bien del psique.
Recuerdo que te quise, o que te quiero.