Amador

Te pienso desde un lugar adyacente
pero a la vez tan lejano.
Ha sido de mi,
lo que nunca quise que fuera,
vivo sola, con mi gato
y de vez en cuando veo la luna.

Recuerdo cuánto me amabas.
Suspiro, río, y me paro ante un espejo
a ver mis arrugas.

Extraño despertar a tu lado,
abrir los ojos
Y toparme con ese pecho lobuno,
Con ese pecho de bosque,
Despertar y con mis labios palpar
tus pezones oscuros
-ciruelos erigidos sobre un monte
Tupido de bellos, donde baba resbalada
Escurre por tu cuero como laguna
Y mis manos recorriéndola
Son sus patos-

Respirar frente a tu nariz,
Luchando por ganarte el aire,
Decirte buenos días con los ojos,
Extraño entre otras cosas
Que me digas que me quieres
Saber que te hago falta,
Y que aunque a metros y tierra
Me encuentre, celar tus genes,
Tus piernas de garza,
Tu aliento a perfidia,
Tu cuerpo de trapo
No será más que utopía.

Las huellas de mi sobra

Juárez

CIUDAD JUÁREZ:100 KM.
POBLACIÓN: 1,832 4 11 HAB.
MUJERES ASESINADAS: 233
DESAPARECIDAS: 139

Ciudat Juárez

Jugar a querer poder hacer lo que no sabemos ser

Quien quiere camina el cielo
Vuela en el agua.
Quien puede hace lo que quiere
Y lo que no quiere.
Consiste en la querencia,
En la dolencia de saberse
Capaz y más que todo
En querer hacer y no necesariamente
En saber o poder hacer.

Yo

Mariposa nocturna
Sumida en vuelo
Batidas mis
Alas de hielo,
Reino la noche
Y no me canso de volar.

A miles de piernas
Me he quedado esperando

Un beso lácteo acompañado
De estrellas amables

Y a cambio he recibido tiempo,
Tiempo para volar y sublevar a
Dios.

Pobre Demetrio...

LA GITANA SE DEJÓ

...LE ROMPIERON SU SUEÑO-VIDRIO EN MIL.

EL SUEÑO DE LA GITANA

no me podrás creer

Estornudo, y el pueblo entero me aplaude.





!TEATRILUS! GRACIAS ENTERAS A SERGIO GALINDO Y A ALICIA POR EXISTIR.

TEATRILUS, A LA MAÍS.
EN SERIO, VAYAN.

nadamás yo me entiendo

Me quiero pasear en un triciclo

-Basta esperar una vuelta al mundo,
Para dejar de querer-

Estás para mí

No pude encontrar en tus ojos, ayer
Lo que buscaba desesperada
Días de lluvia atrás,

Trozos de llanto, evidencia de tacto,
Quizá pena o remordimiento,

Más pude mirar en ellos
Una sábana blanca,
Tejida con los dientes

Y la perseverancia de la pena
y en ella escrito “cuánto la extraño”.

Cuando no se propone nada

Cuánto himen roto, qué va qué pena.
Tan roto como las puntas de los colores
Que traemos en la mochila,
Como los colmillos de las víboras,
Venenosas con falditas cortas
O Como los brazos de los futboleros,
Cheros que petrifican a las nenas con
Una vaquera apretada,
O como los labiales de nuestras mamás,
Derretidos, embarrados en otros cuerpos,
Rotos por única vez, y sin saber
cuándo o con qué, que si anduve en caballo
a los trece, que si jugaba a la ardilla
y de los árboles no caía ni bajaba,
que si gimnasta, que si Julieta.
Para qué jugarla, si por más quejas que haya
ni Björk dejará de gritar ni yo de enterarme
de tanta porquería de la vida,
gusto sea a quien le alcance la vida y esa rotura,
que le aprovechen los años, y que no
le besen la espalda.

Piedras pintas

Sumergida en la inmensidad del mar
veo caer pico abajo a las gaviotas
huele a brisa, se escapa un aliento.

Regocijada nado entre las olas,
con el vientre turbio, y sin aletas
en las piernas, templo el agua.

Dónde ponerte…,
Sí si te acerco al sol, te
duermes
Y si te quito el agua te secas
Y si te pongo ropa te
asfixias
Y si te beso, más me odias,
Dónde ponerte, dónde,
dónde no te
penetre el aire los pulmones,
ni te arrincone la vida
en una esquina,
dónde,
dónde, dónde.

Hongos del cafetal

Hongos del cafetal con olor
A tierra, comen los gusanos
El fruto del mamey
En la cumbre del cerro
crece un árbol,
Desde donde se podrá ver
La pierna de algún degollado
inmortalizado en mármol.
Los portales encierran cantos
Sujetos al llanto, donde lo feliz
No era cantarlo sino oírlo
Las delicias de tu lengua de metal
Entrometida y cabruna
Son de fuego y de aire
A qué juegas al navegarme
Qué piensas al besarme
Guarda mi boca cementerio de
Bacterias cleptómanas
Y a ti te encantan,
Vayámonos
Al sur, ahí los pies
No cesan de pensar.

Dístico

La paz que queda en mí
brotó de mis sueños.

Se ancló un día a mi vida,
Dejé de soñarte.

Convertido en carne
Apareciste a mi lado

Qué quimera de mierda,
Qué blasfemia apalabrada

Ya te quería tanto y tu nunca
Lo habías ni notado
ni sabido.

Uno se mete en otro,
-El otro se mete en el uno-.

Cayó el cigarro, tocó fondo,
la taza del baño, me paro.

Y sólo pienso en respirar, en
Hacer eterna esta complicidad,

En tenerte mío por tiempo
Como si objeto,

En gastarte a besos los labios,
Aunque no te alcance

Mientras corras frente a mí
Con tus años, o sentado a mi lado.

La vida.